viernes, 27 de agosto de 2010

En la gran ciudad hay millones de personas que viven, trabajan y buscan la felicidad a diario. Hay menos matrimonios y gran parte de éstos fracasa en los primeros cinco años, o menos. Hay menos parejas y más personas viviendo solas. Sin embargo las encuestas coinciden: el máximo anhelo de la mayoría es encontrar el amor.


· ¿Por qué, entonces, si lo que más desea una chica es ser amada, a veces, logra todo lo contrario?



· ¿Es posible que lo que impide encontrar el amor sea, justamente, nuestra búsqueda desesperada?



· ¿Será posible que, al estar tan ocupados en buscar, perdimos la capacidad de encontrar?



· ¿Será que buscamos algo que no existe?. ¿Será que vivimos el amor bajo la premisa histérica del "deseo tanto" y "no soy deseado"?