viernes, 2 de abril de 2010

Crecí. Esa es la palabra. Y pensar qe lo sentí como de un día a otro. Ciertas palabras, actitudes, gestos, respuestas, "arranqes", pensamientos, frases, miradas, perspectivas, objetivos, sueños, intereses, personas, sentimientos, lugares y hasta procesos se transformaron completamente para mi. SIEMPRE qise ser ésto qe soy ahora. Ésto qe viste y calza sentada al frente de un insignificante monitor de computadora pensando cómo va a llegar a expresarse disfrazando lo qe de verdad siente por ÉL. Añoré tanto este tiempo, qe ahora qe lo estoy viviendo, no me convence del todo. Qise jugar a ser la persona grande qe entiende todo y puede llevarse el mundo por delante, y me olvidé de qe existe alguien qe no se va de mi cabeza. Alguien qe puede irse y venir, qe puede decirme un millón de palabras con solamente un silencio y hasta puede dar vuelta mi mente. Maduré y ahora anhelo volver a ser esa peqeña y traviesa princesita qe se perdió en un juego de conqista llamado "Amor", qe no tenía las reglas explicitadas. Qe se jugaba como tu corazón te decía y era la única forma de ganarlo. Qiero volver a lo qe alguna vez nos hizo tan felices, y qe hoy, ya no tiene el mismo valor.